DE LARVA A MARIPOSA

PARTE II

Aunque la idea de transformarme en una mariposa era hermosa y gratificante y también un poco poética, no podía evitar sentirme mal por la situación exterma en la que estaba. Algunas veces me preguntaba si no me estaba mintiendo a mí mismo con imaginaciones para escapar de mi dolor. Pero no era el caso, no me podía inventar el libro que llegaba a mis manos donde aparecía una mariposa, tampoco la mariposa que veía volando por la ventana, o como recibir una carta de un amigo donde sin saber nada me enviaba una imagen de una mariposa y hablando de libertad.
Algo estaba pasando.En una situación tan extrema y desesperante no podía odiar a las personas que habían hecho todo lo posible para destruir a mí y a mi familia.  Tanto odio junto de un grupo de personas que no dudaron en volcar sus propias culpas en mí, y yo no podía odiarlas, lo intenté en algunas ocaciones pero no funcionaba, mi corazón me dolía mas cuando quería odiarlas. Por el contarrio cuando las veia como parte de mí, sentía armonía y tranquilidad. Es que me estaba volviendo loco?. Ésa no era la forma que alguien que había sido atacado con semejante odio, debiera raccionar!. Pero era la realidad y tenía que aceptarla porque de otra forma no sería yo. Recuerdo que al principio de la situación yo creía que odiaba a ésa gente, pero después me dí cuenta que en realidad no era odio si no tristeza y pena.
Comencé a acordarme de las enseñazas de Jesús: "Ama a tus enemigos como a tí mismo" , y yo lo estaba haciendo!! pero no por mí mismo si no porque estaba transformandomé desde el Vacío donde no había quedado nada de mí, no estaba mi ego, ni mis sentimientos, ni mis pensamientos, tampoco mis emociones. Fue un momento donde yo no existía como personalidad, sólo era la escencia que cargaba con un cuerpo físico, ni siquiera era el viento, si no solo el espíritu que lo movía.
Me pregunto si yo no hubiera pasado por éste momento tan extremo que me llevó a "vaciarme" , podría haber sentido el mismo amor por ésa gente como lo siento hoy?. Nunca podré saberlo. Pero si sé que que cualquiera puede conseguir lo que yo conseguí y sin hacer falta pasar por una experiencia traumática como yo lo hice. Y porqué lo sé?, porque yo no soy nadie especial ni extraño, soy un ser humano como cualquiera y con las mismas posibilidades que tiene todo el resto del mundo, no hay nada que nos haga diferentes, ya que estamos cerados por la misma "Mano" divina y respiramos el mismo aire y nos ilumina el mismo sol.
Quizás lo único que sea necesario para llegar a amar incondicionalmente a nuestros semejantes es pasar por la noche oscura del alma, como lo escribió San Juan de la Cruz. Viajar adentro de uno mismo y enfrentar los propios "montruos" internos con valentía y mucho amor

FIN PARTE II