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domingo, 20 de octubre de 2013

Recuperar la capacidad de asombrarse


El ser humano está inmerso en el  mundo de los sentidos, un cúmulo inmenso de información es absorbida diariamente y a tal velocidad que la mayoría de ésa información no se es conciente. Sólo cuando abrimos los ojos por la mañana al levantarnos, comienza el bombardeo desde la realidad que vivimos y un continuo flujo de pensamientos y conceptos comienza a fluir por nuestro cerebro, a éso se le suma simultanemanete los otros sentidos como el del gusto, el olfato y el tacto al hacer conciencia de nuestro cuerpo cuando nos despertamos y tomamos nuestro desayuno. Y de ésa forma estamos otra vez conectados en la rutina diaria y y a la matriz que ya conocemos y que somos los propios creadores (concientes o no).
Quizás leemos el periódico para obtener más información de ésa matriz, o escuchamos la radio para conocer las últimas noticias, después nos vamos a nuestro trabajo o actividades como cada día acostumbramos a hacerlo y entramos en ésa rutina diaria que muchas veces nos aburre y nos cansa y pensamos o deseamos que suceda "algo" especial o exitante para romper ésa rutina que venimos repitiendo desde siempre. Queremos asombrarnos de algún suceso que se escapa a lo ordinario o buscamos hacer algo fuera de lo normal o hasta asombrarnos de lo inusual en el comportamiento de algunas personas y a la que criticamos o elogiamos, pareciera que estamos buscando conciente o inconscientemente algo para asombrarnos y que nos saque de ésa rutina de todos los días.
Pareciera que el ser humano a perdido la capacidad de asombrarse con lo más cercano y simple y que está a su disposición en cada segundo y en cada situación que experimenta desde que se despierta a hasta que se duerme. Ocurren cosas realmente increíbles todos los días y a cada momento, pero como son cosas que suceden justamente todos los días y casi automáticamente, no nos damos cuenta de que son cosas para asombrarse como si fueran milagros y la mayoría de ellas indispensables para que podamos seguir viviendo.
Por ejemplo el simple hecho de que respiramos automáticamente y sin ni siquiera pensarlo pero que gracias a éso estamos con vida!!, no es éso algo increíble? y lo más increíble es que casi nunca le agradecemos a nuestro cuerpo tan semejante servicio, o quizás sólo cuando estamos a punto de ahogarnos y salimos a la superficie y tomamos una bocanada de aire. Has pensado que respiramos todos los días de nuestra vida porque el oxígeno está presente continuamente y gratuitamente ahí para todos los seres vivientes?. Pero no, lo damos por hecho de que es así y que es algo normal que tiene que ser así y que no tiene nada de extraordinario. Al igual que el acto de dormir y que es como una "media muerte" pero nuestro cuerpo sigue funcionando por sí mismo, respiramos y nuestro corazón sigue latiendo y todo el cuerpo continúa trabajando para seguir con vida. Y agradesemos alguna vez a nuestro cuerpo ése servicio? pues no, inclusive la mayoría de las veces lo tratamos mal envenenándolo y maltratándolo, y así mismo nuestro cuerpo trata de limpiar lo que nosotros ensuciamos para intentar mantenerse sano y con vida.
El ser humano debe recuperar la capacidad de asombrarse de las pequeñas y diarias cosas con las que convivimos y que son en definitiva las más importantes. Nos preocupamos por nuestra economía, porque no nos gusta el coche que tenemos o la ropa que vestimos o lo que comemos, y hasta nos amargamos la vida porque pensamos que los políticos de turno no son honestos, pero nos olvidamos de lo escencial y ello es de saber quién y qué somos y de la magnífica y única oportunidad de estar con vida y poder experimentar por intermedio de nuestros sentidos los "milagros" diarios de la vida, como oler una flor y asombrarse de su belleza y su crecimiento, de beber un vaso de agua y sentir como su frescor y nutrientes indispensables para la vida está a disposición cada día para mantener mi cuerpo hidratado. Cuando masticamos un alimento y lo  procesamos con nuestros dientes y saliva para absorver las vitaminas y minerales que son necesarios para nuestro cuerpo.
No es increíble que el sol brille cada día y nos dé su energía que es imprescindible para la vida en nuestro planeta? o que la lluvia caiga gratuitamente y riegue los campos para que la tierra nos dé los alimentos?
No es impresionante el solo hecho de poder hablar? combinar sonidos con pensamientos para crear una comunicación!. Y así podría continuar con una lista interminable de cosas increíbles que suceden a diario y que son más imprescindibles para la vida. Quizás muchos de los que buscan la iluminación o el despertar espiritual o la razón de vida lo puedan encontrar en la propia respiración o en el "simple " latido de su corazón.
"Alguien le preguntó a Dios: porqué es tan difícil encontrar la verdadera felicidad ? y Dios contestó: porque me aseguré de esconderla en un lugar seguro. La buscáis en lugares lejanos, en sucesos extraordinarios y de formas sofisticadas, pero sólo en vuestro corazón la encontraréis porque yo estoy más cerca de dónde vosotros me buscáis, existo en vuestra propia respiración, y en cada momento que os asombráis del vuelo de un pájaro, de la caricia del viento en vuestro rostro, en el aroma de una simple flor o en el latido incansable de vuestro corazón, cuando comencéis a asombraros de la simplicidad, encontraréis la felicidad total y por fin sabréis quién realmente soy y por consecuencia quién realmente sois".