Dónde están los problemas?

De dónde vienen lo que llamamos problemas o dónde tienen su origen?. Generalmente enfocamos la atención en lo externo o situaciones que creemos ajenas a nuestra realidad interior y por ello nos sentimos afectados emocionalmente, perturbados, tristes o enfadados y especialmente cuando creemos que es injusta la aparición de un problema o un conflicto. Entonces es cuando comenzamos a luchar en contra del problema para arreglarlo o minimizarlo lo mejor que podemos o sea que en otras palabras, creamos un rechazo casi instantáneo y por lo tanto una resistencia a la situación manifestada.
Desde ése mismo momento pareciera que el problema crece o se hace más intenso ya que le prestamos más atención y alimentamos con nuestra energía, entonces es cuando nos damos cuenta ( a veces) que a lo que uno se resiste simplemente persiste. Pero sucede algunas veces que de tanto darle vueltas al problema en cuestión, nos cansamos y decimos: "voy a consultar con la almohada a ver si viene la solución", refiriéndonos a irnos a dormir y esperar al día siguiente una respuesta. E increíblemente en muchísimos casos sucede que la solución aparece después de dejársela "a la almohada", pero porqué?.
Yo puedo solo compartir mi experiencia sobre problemas (que no fueron pocos ni menores) y a los que me apegué como cualquiera lo hace y les dí mi energía "manteniendoles" a mi lado para luego no saber como sacármelos de encima. En algunas situaciones consideradas como graves y donde lo primero que uno hace es maldecir y comenzar a preocuparse se experimenta frustración, miedo y desesperación, entonces es cuando todo se torna oscuro y no se puede ver una salida del problema...bueno en realidad no se puede ver nada mas que no sea el problema mismo.
Pero sucede, o por lo menos a mí me sucedió, que uno no reacciona hasta que se está en el fondo del pozo y siente que todo está perdido y dice: "abandono y no me preocupo más, de todas formas no puedo hacer otra cosa", y en realidad es ahí justamente donde los milagros comienzan a suceder, pero ésto solo se sabe después de que pasen y no cuando se está en medio del proceso y lo más importante es que ésos milagros provienen de nuestro interior y no del cielo. Recuerdo que cuando adopté la actitud de soltar el problema y dejar que sea lo que sea, sentí una gran paz interior a pesar de la crisis, y éso se manifestó como una sensación de "perder peso" o en otras palabras de alivianar mi equipaje. Luego de haber superado el dichoso problema medité sobre el proceso y cómo se había acomodado toda la situación pero buscando afuera de dónde venía el milagro y le dí crédito a situaciones o a personas a las que creí ser el origen del mismo, pero no me sentía completamente en paz era como si faltara algo, simplemente no era suficiente!.
Después de ésa situación tuve algunas otras con diferentes problemas y cuando llegaba al momento en que se hacían casi insoportable me acordaba de poner en práctica la misma actitud que me sacó de las tinieblas, o sea el volver a soltar el problema!! para luego ver como el problema se resolvía solo.
Todo éso me llevó a desmenuzar todas las situaciones y ver qué estaba pasando cada vez que lo dejaba ir y no me resistía si no que dejaba que la esencia de mi interior, que no es la que piensa ni razona, entrara en juego y moviera ésas energías que no percibimos ni vemos pero que están ahí esperando que les demos permiso para actuar. Entonces es cuando todo encuentra el ritmo y el camino natural y correcto. Por ello llegué a una conclusión y es la que voy a expresar aquí.
"Los llamados problemas tienen orígen en primer lugar y ante todo dentro nuestro pero no siempre somos conscientes de ello, somos generadores continuos de pensamientos y acciones, conscientes o no y que lógicamente producen efectos ya que si movemos energías éstas no se pierden en el éter si no que producen una reacción en cadena que de alguna forma mueven otras energías que actúan de manera realmente inteligente y que no tienen nada que ver con el ego si no con nuestra parte divina, superior o como quiera llamarse. Y no es necesario creer en Dios o ser espiritual si no que se trata de probar y confiar en nuestra esencia que es la que sabe que hacer, siempre y cuando les demos permiso. Y éste es mi mensaje para tí que lees ésto y que quizás te encuentres en una situación problemática o crítica y que no sabes cómo salir de ella. Suelta,suelta y vuelve a soltar pero éso no significa que no actúes, pero actuar tampoco significa querer tomar el control ya que en realidad nunca tenemos el control de nada, si no que creemos tenerlo. El verdadero control se tiene cuando permites que tu esencia suprema se manifieste y dejes de entrometerte con tu ego si no que uses al mismo como guía del camino que no debes seguir. Mientras más se ponga en práctica el poder de soltar y no apegarse al problema, mas te acercarás a la verdad única que es la Unidad de Todo lo que Es y que nada está separado de nosotros y que hasta el más sofisticado y superficial de los pensamientos e inclusive hasta el suspiro más pequeño y suave que emitimos, está conectado con el resto del universo y de una forma que no alcanzamos a comprender pero que producen efectos y consecuencias en toda la realidad que nos rodea. En definitiva, somos creadores y artífices de nuestros propias creaciones mentales y que éstas se manifiestan
seamos conscientes o no o creamos en ello o no, es una ley universal llamada Mentalismo y que dice que todo es mental, todo lo creado y manifestado tiene orígen primero en la mente. Por ello cree en tí, en el que realmente eres y no en el que crees que eres. Eres mucho mas de lo que parece, eres tan grande como el mismo universo y estás hecho como todo ser humano de polvo de las estrellas y existe en tí un poder inmenso que se llama poder de elección y que lo estamos usando a cada segundo de nuestra vida creando y manifestando nuestra realidad. Para terminar saber que cuando un problema se presenta la solución viene en el mismo paquete ya que vienen del mismo lugar...de dentro nuestro. Recuerda: Si tienes un problema y éste tiene solución, no te preocupes ya que tiene solución. Y si tienes un problema que no tiene solución tampoco te preocupes porque aparentemente no tiene solución, o se suelta y no te preocupes de ninguna forma y deja que tu verdadera esencia actúe.